Primer día de su ciclo menstrual es el primer día de su
período (día 1). A partir de entonces, el período se prolonga normalmente entre
3 y 7 días. Probablemente perciba que, si experimenta dolores menstruales, sean
más agudos los primeros días del período. La razón es que las hormonas de su
cuerpo provocan que el útero se deshaga del endometrio que se creó en el ciclo
menstrual anterior.
Preparación para la ovulación
Al principio del ciclo, la glándula pituitaria del cerebro
segrega la hormona foliculoestimulante (FSH). Esta es la principal hormona que
estimula los ovarios para que produzcan óvulos maduros. Los folículos son las
cavidades repletas de fluido que se encuentran en sus ovarios. Cada folículo
contiene un óvulo sin desarrollar. La FSH estimula varios folículos para que se
desarrollen y comiencen a segregar estrógenos. Los estrógenos se sitúan en su
nivel más bajo el primer día del período. A partir de ese momento, el nivel
comienza a aumentar a medida que los folículos crecen.
Aunque varios folículos comiencen a desarrollarse desde el
primer momento, solo uno de ellos se hace "dominante", por lo que es
su óvulo el que madura dentro del folículo creciente. Al mismo tiempo, la
cantidad cada vez mayor de estrógenos que contiene su cuerpo garantiza que el
endometrio se colme de nutrientes y sangre. El propósito es que, si se queda
embarazada, el óvulo fecundado disponga de todo el sustento y los nutrientes
que precisa para crecer. Los altos niveles de estrógeno también se asocian con
la aparición de la mucosidad "favorable para el esperma" (o, según su
nombre técnico, mucosidad cervical fértil). Puede percibirla como una secreción
fina y resbalosa de color blanco turbio. El esperma se desplaza más fácilmente
a través de esta mucosidad y puede sobrevivir en ella durante varios días.
Su cuerpo produce las hormonas que controlan su ciclo
menstrual. Al inicio de su ciclo, una hormona importante es la hormona
foliculoestimulante (FSH). El aumento de la hormona FSH estimula los folículos
de sus ovarios (cavidades llenas de fluido que contienen un óvulo sin
desarrollar) para desarrollar y comenzar a producir otra hormona llamada
estrógeno.
Comprensión del ciclo de la ovulación
Ovulación
El nivel de estrógenos presente en su cuerpo todavía está en
aumento y, finalmente, provocará la subida repentina de la hormona luteinizante
(llamada "aumento de la LH"). Este aumento de la LH provoca que el
folículo dominante se rompa y libere el óvulo maduro del ovario, que entra en
la trompa de Falopio. Este proceso se conoce como "ovulación".
Muchas mujeres creen que ovulan el día 14, pero se trata de
una media, ya que la mayoría de ellas realmente ovula un día del ciclo
menstrual diferente. El día de su ovulación variará cada ciclo. Algunas mujeres
manifiestan dolores agudos cuando ovulan, pero muchas no experimentan sensación
alguna y no existen otros síntomas que indiquen que se está ovulando.
El nivel de estrógeno en su cuerpo sigue aumentando y,
llegado a un cierto nivel, provoca un aumento rápido de la LH
["aumento" de la LH]. Este aumento de la LH activa la ovulación, que
es el proceso durante el que se libera un óvulo del ovario. Aunque muchas
mujeres piensan que su ovulación se produce el día 14, en realidad, esta varía
según la duración del ciclo. Algunas mujeres sienten una punzada de dolor
cuando ovulan.
Después de la ovulación
Una vez liberado el óvulo, este se desplaza a lo largo de la
trompa de Falopio hacia el útero. El óvulo tiene una vida de hasta 24 horas. La
supervivencia del esperma es más variable, pero normalmente se prolonga durante
3 o 5 días, por lo que los días que preceden a la ovulación y el mismo día de
la ovulación son los más fértiles, es decir, cuando es más probable que se
quede embarazada. En el momento en que finaliza la ovulación, el folículo
comienza a segregar otra hormona: la progesterona.
La progesterona provoca el crecimiento del endometrio con el
fin de prepararlo para recibir un óvulo fecundado. Mientras tanto, el folículo
vacío del ovario empieza a contraerse, pero sigue segregando progesterona, y
también comienza a segregar estrógenos. En esta etapa, puede experimentar
síntomas de tensión premenstrual (TPM), como dolor al palparse el pecho,
hinchazón, letargo, depresión e irritabilidad.
Una vez liberado el óvulo, este se desplaza a lo largo de la
trompa de Falopio hacia el útero. El óvulo vive entre 12 y 24 horas pero, dado
que el esperma puede vivir varios días, se encuentra en su período más fértil y
es más probable que pueda quedarse embarazada si mantiene relaciones sexuales
sin protección el día que ovula o el día de antes. En cuanto haya ovulado, el
folículo comienza a producir otra hormona llamada progesterona.
Preparación para el siguiente período
A medida que el folículo vacío se contrae, si el óvulo no se
fecunda, los niveles de estrógeno y de progesterona disminuyen. Sin los altos
niveles de hormonas que favorecen su conservación, el grueso endometrio creado
comienza a desprenderse y su cuerpo libera este revestimiento uterino. Este es
el inicio de su período y el comienzo de su siguiente ciclo menstrual.
A medida que el folículo vacío se contrae, si el óvulo
fecundado no se ha implantado en el útero, su nivel de progesterona disminuye.
El útero ya no necesita preservar un entorno para mantener al bebé, de modo que
el cuerpo debe reajustarse y prepararse para el siguiente ciclo. Cualquier
síntoma de TPM (tensión premenstrual) que tenga, empezará a disminuir. Sin unos
altos niveles de hormonas que ayuden a mantenerlo, el grueso revestimiento del
útero que se ha creado comienza a desprenderse y su cuerpo lo expulsa. Este es
el inicio de su período y el comienzo de su próximo ciclo.
Si el óvulo se ha fecundado e implantado en el útero, el
folículo vacío se mantiene con el aumento del nivel de la hormona del embarazo
(gonadotropina coriónica humana). Se siguen produciendo estrógenos y
progesterona durante más tiempo hasta que la placenta se ha desarrollado lo
suficiente como para soportar el desarrollo del embrión.
Si el óvulo se ha fecundado, puede implantarse correctamente
por sí mismo en el endometrio. Por lo general, este suceso tiene lugar,
aproximadamente, una semana después de la fecundación.
Tan pronto como el óvulo fecundado queda implantado, su
cuerpo comienza a segregar la hormona del embarazo, es decir, gonadotropina
coriónica humana (hCG), que mantendrá la actividad del folículo vacío. Además,
continúa segregando estrógenos y progesterona para evitar el desprendimiento
del endometrio hasta que la placenta (que contiene todos los nutrientes que
precisa el embrión) madure lo suficientemente como para mantener el embarazo.